MULTITUD
A - Nombre
hamôn (1995, הָָמון), «multitud; barullo; agitación; tumulto; alboroto; conmoción; desorden; trastorno; bullicio; muchedumbre; abundancia». Este nombre se encuentra 85 veces en hebreo bíblico, durante todos los períodos.
El vocablo se refiere a mucha «conmoción o agitación»: «Mira desde el cielo y contempla desde la excelsa morada de tu santidad y de tu gloria: ¿Dónde están tu celo y tu poderío? La conmoción de tu corazón y tu compasión me han sido retenidas» (Isa. 63:15 RVA).
Hamôn se refiere al «alboroto o agitación» de una multitud: «Cuando Joab envió al siervo del rey, a tu siervo, vi un gran alboroto, pero no supe de qué se trataba» (2 Sam. 18:29 RVA). En Isa. 17:12 (RVA) el término es un paralelismo sinónimo de «estruendo o bullicio»: «¡Ay del tumulto de los muchos pueblos que rugen como el rugido del mar! El bullicio de las naciones resuena como el bullicio de las aguas impetuosas».
A veces hamôn se refiere al ruido que causa una muchedumbre agitada (un «tumulto»: «Al oír Elí el estruendo del griterío [después que los filisteos derrotaron a Israel], preguntó: ¿Qué estruendo de alboroto es este?» (1 Sam. 4:14 RVA). En Isa. 13:4 el vocablo señala el estruendo de un ejército que se congrega, a diferencia del griterío confuso de una ciudad enlutada: «Estruendo de multitud en los montes, como de mucho pueblo; estruendo de ruido de reinos, de naciones reunidas; Jehová de los ejércitos pasa revista a las tropas para la batalla». Cuando está devorando su presa, un leoncillo no se atemoriza por el ruido de un grupo de pastores (Isa. 31:4). Hay algunas excepciones a la regla que el término tiene que ver con el ruido de un gran número de personas. En 1 Reyes 18:41 hamôn significa el estruendo de un aguacero (cf. Jer. 10:13) y en Jer. 47:3 denota el estrépito de carruajes.
Hamôn a veces quiere decir una «multitud o muchedumbre» que suele ser bulliciosa. Con frecuencia el vocablo se refiere a un gran ejército: «Y yo atraeré a ti al arroyo de Cisón a Sísara, capitán del ejército de Jabín, con sus carros y su ejército» (Jueces 4:7; «sus muchas tropas» LBA; cf. 1 Sam. 14:16). En otros casos, hamôn se refiere a todo un pueblo: «Entonces repartió a todo el pueblo, a toda la multitud de Israel» (2 Sam. 6:19 RVA). Finalmente, el término puede denotar cualquier muchedumbre o un gran número de personas (Gén. 17:4: primer caso del término).
Hamôn puede indicar un gran conjunto de cosas: «Oh Jehová, Dios nuestro, toda esta abundancia que hemos preparado para edificar una casa a tu santo nombre, de tu mano proviene y todo es tuyo» (1 Cr. 29:16 RVA).
La abundancia de posesiones y riquezas también involucra a hamôn, como en: «Mejor es lo poco del justo, que las riquezas de muchos pecadores» (Sal. 37:16; cf. Ecl. 5:10: paralelo a «plata» [dinero]; Isa. 60:5).
Por último, hamôn se refiere a un grupo de personas que se organizan alrededor de un rey, específicamente sus cortesanos: «Oh hijo de hombre, di al faraón, rey de Egipto, y a su multitud [su cortejo]: ¿A quién te has comparado en tu grandeza?» (Ezeq. 31:2 RVA). Dentro de esta misma línea, en Sal. 42:4 el vocablo puede referirse a una procesión festiva.
B - Verbo
hamah (1993, הָמָָה), «hacer ruido, ser bullicioso, rugir, gemir, ladrar, sonar». Este verbo, que aparece 33 veces en hebreo bíblico, tiene cognados en arameo y arábigo. Encontramos un ejemplo en Sal. 83:2 (RVA): «Porque he aquí que rugen tus enemigos, y los que te aborrecen han levantado la cabeza».