ANDAR
A - Verbo
halak (1980, הָלךְ), «ir, andar, caminar, comportarse». Este verbo se encuentra en la mayoría de los idiomas semíticos (aunque su significado es diferente en arábigo). Se encuentra también en todos los períodos del hebreo y en el Antiguo Testamento, 1550 veces, así como varias veces en arameo.
Esencialmente esta raíz tiene que ver con el movimiento de personas (Gén. 9:23), bestias (Gén. 3:14) u objetos inanimados (Gén. 2:14, la primera vez que figura), sin dirección específica. Halak se puede traducir «ir» cuando no se refiere al «caminar» de seres humanos. A veces se usa con un énfasis particular en el fin u objetivo de la acción que se tiene en mente; los seres humanos son «carne, soplo que va y no vuelve» (Sal. 78:39). Cuando tiene que ver con la existencia humana, el término sugiere «caminar hacia la muerte», como en el caso de Abram: «Señor Jehová, ¿qué me darás, siendo que ando [hacia la tumba] sin hijo… ?» (Gén. 15:2). El vocablo puede usarse con relación al «comportamiento», a la manera en que «caminamos» en la vida. «El que camina en justicia» Dios le bendecirá (Isa. 33:15). Esto no se refiere a caminar erguido, sino a vivir una vida justa.
La raíz tiene varias acepciones particulares. Sirve para enfatizar una acción; Jacob fue y consiguió los cabritos que le pidió su madre, o sea, que en realidad cumplió con la acción (Gén. 27:14). En Gén. 8:3 las aguas del diluvio fueron «retrocediendo» (BJ) poco a poco de la superficie de la tierra. A veces el verbo connota alejarse de, como en Gén. 18:33, cuando el Señor «se fue» después de hablar con Abraham.
Hay tres sentidos en que Dios «camina» o «va». Primero, el caso donde Él asume algún tipo de forma física. Por ejemplo, Adán y Eva oyeron la voz de Dios que «se paseaba» en el huerto de Edén (Gén. 3:8). «Anda» sobre las nubes y «las alas del viento» (Sal. 104:3) o en los cielos (Job 22:14). Estos son probablemente antropomorfismos (se habla de Dios en forma corporal). Con mayor frecuencia se dice que Dios acompaña a su pueblo (Éx. 33:14), que Dios «va» para rescatarlo de Egipto (2 Sam. 7:23) y que «viene» a salvarlo (Sal. 80:2). La idea de que Dios «va» («camina») delante de su pueblo en columnas de nube y de fuego (Éx. 13:21) lleva a la idea de que este pueblo debe «andar» en pos de Él (Deut. 13:5). A menudo se dice que Israel ha «ido», o bien se les advierte que no «vayan», tras dioses ajenos (Deut. 4:3). De esta manera, la idea más o menos concreta de seguir a Dios en el desierto da lugar al concepto de «andar detrás» de Él espiritualmente. Algunos estudiosos sugieren que «andar detrás» de dioses paganos (o del Dios verdadero) surge del culto pagano en que los dioses se cargaban delante del pueblo al entrar al santuario. Jerusalén dejará de «andar» tras «la dureza de su malvado corazón» (Jer. 3:17). Las personas piadosas que siguen o practican los mandamientos de Dios «caminan» en justicia (Isa. 33:15), en humildad (Miq. 6:8 BJ) y en integridad (Sal. 15:2). También «andan con Dios» (Gén. 5:22 BJ), viven en su presencia y «andan» (en el sentido de vivir responsablemente) delante de Él (Gén. 17:1).
B - Nombres
halîkah (1979, הלִיכָָה), «trayecto; obras, grupo de viajeros; caravana; procesión». El nombre aparece 6 veces en el Antiguo Testamento.
El vocablo tiene varios matices. En Nah. 2:5 halîkah se refiere a un «trayecto»: «Se acordará Él de sus valientes; se atropellarán en su marcha». En Prov. 31:27, el término tiene la acepción de «obras». Puede también significar «compañeros de viaje» o «caravana» como en Job 6:19 (RVA) o una «procesión» como en Sal. 68:24 (LBA).
Varios nombres relacionados aparecen con poca frecuencia. Mahalak, que aparece 5 veces, significa «corredor» (Ezeq. 42:4) y «viaje» (Neh. 2:6). Helek aparece un par de veces con el significado de «visitante» (2 Sam. 12:4 BJ). Halîk aparece una vez con la acepción de «pasos» (Job 29:6). Tahalukot aparece sola una vez significando «procesión», particularmente de acción de gracias (Neh. 12:31).