CONFRONTAR
qara˒ (7122, קָרָָא), «confrontar, encontrarse, acontecer»). Qara˒ representa una «confrontación» intencional que encara una persona con otra. Puede ser una «confrontación» amistosa en que un amigo «se encuentra» intencionalmente con otro, como en el caso de los reyes del valle que salieron al «encuentro» de Abram cuando regresa de derrotar al ejército merodeador de Qedorlaomer (Gén. 14:17). O cuando una hueste sale para «encontrarse» con un posible aliado (Jos. 9:11; 2 Sam. 19:15). En contextos cúlticos, uno «se encuentra» con Dios o «es encontrado» por Dios (Éx. 5:3).
Qara˒ puede también referirse a una «confrontación» hostil entre dos fuerzas para entablar lucha (Jos. 8:5); por lo que se advierte a Israel: «¡Prepárate para venir al encuentro de tu Dios, oh Israel!» (Amós 4:12 RVA).
En los pocos casos en que el término tiene el sentido de un «encuentro inesperado o accidental», se traduce con el verbo «acontecer» (Gén. 42:4).
qadam (6923, קָדַַם), «encontrarse, confrontar, ir delante, estar delante». Este verbo aparece 27 veces y en todos los períodos del hebreo bíblico. El uso más frecuente del término es en contextos bélicos. Las confrontaciones pueden ser pacíficas, como cuando fuerzas aliadas se encuentran: «Le has salido al encuentro con bendiciones de bien» (Sal. 21:3). Los encuentros también pueden ser hostiles: «Me rodearon las ligaduras del Seol; me confrontaron los lazos de la muerte» (2 Sam. 22:6 RVA).