GOBERNAR
mashal (4910, משַַל), «gobernar, reinar, dominar». El término es de uso corriente en hebreo antiguo y moderno. Se encuentra alrededor de 100 veces en el texto hebreo veterotestamentario. El vocablo se usa por primera vez en Gén. 1:18, donde el sol, la luna y las estrellas se pusieron para «dominar en el día y en la noche» (RVA).
Mashal se usa con mayor frecuencia en el texto para expresar «el gobierno o dominio» de una persona sobre otra (Gén. 3:16; 24:2). Se aconseja a Caín que debe «dominar» o «enseñorearse» del pecado (Gén. 4:7). Los hermanos de José responden a sus sueños con una pregunta airada: «¿Has de reinar [malak] tú sobre nosotros y nos has de dominar [mashal]?» (Gén. 37:8 RVA; la frase hebrea dice literalmente «gobernando gobernarás», repitiendo la misma raíz para mayor énfasis).
Como Creador y Soberano sobre su mundo, Dios «se enseñorea con su poder para siempre» (Sal. 66:7 RVA). Cuando Dios permitió que Israel tuviera un rey, fue con la condición de que Él sería Rey supremo y que la primera lealtad se le debía a Él (Deut. 17:14-20). Tal vez Gedeón exprese con más claridad este ideal teocrático: «Yo no os gobernaré a vosotros, ni tampoco os gobernará mi hijo. Jehová os gobernará» (Jueces 8:23). Con la posible excepción de David, ningún rey de Israel alcanzó plenamente este ideal teocrático, ¡y aun él tuvo sus problemas!